lunes, 13 de octubre de 2008

Bueno como ya estoy viendo me voy a tener que echar un viajecito pa Berlin yo un simple campesino en la ciudad movido por el exodo metalero en busca de mejores oportunidades metaleras y culturales, es que tenia que ser en Berlin alemania hijos por eso voy a tener que aprender a hablar aleman jajaja, dichosos los niños que tienen plata y viajan al exterior porque yo me voy a tener que esperar unos cuantos años mas para graduarme, pero bueno aqui tengo esto lo hice por curiosidad a ver que hace un gotico el viernes por la tarde viviendo en un pais desarrollado jeje.



Reseña de un tipo que viajo mucho

Cuando voy de vacaciones a ciudades en el extranjero una de las cosas que hago es intentar documentarme sobre locales de ambiente gótico que puedan tener para visitar alguno de ellos. Hace tres años estuve en Berlín, que junto a Londres, están consideradas las dos ciudades con un movimiento gótico más importante en Europa.

Uno de los locales que visité fue esta discoteca, la K17 que dispone de cuatro ambientes diferentes de música en las cuatro salas que tiene. En mi caso fui un jueves y la afluencia en esos momentos era escasa, de hecho solo tenían abierta una de las salas. Como curiosidad os diré que la foto que me acompaña en ciao está sacada de dicha discoteca.

Para llegar tomé el metro en la U5 desde la estación de Alexander Platz hasta la de Frankfurter Allee. Una vez en el exterior veremos un pequeño centro comercial, que a las horas en las que fui (serían alrededor de las 10 de la noche) estaba cerrado. Tenemos que coger una de las calles que suben, la Pettenkofer Strasse y en el número 17a está la discoteca. Hay que tener algo de cuidado ya que se encuentra detrás de unos edificios de viviendas; cuando fui, nos la pasamos de largo, volvimos a bajar y al final descubrimos donde estaba. Además en la calle no había nadie (en una ciudad que no conocíamos ni idea de si era un barrio recomendable o no), a los únicos que vimos fue a unos jóvenes que hablaban en castellano subiendo por dicha calle mientras buscábamos la discoteca.

Para volver, como el metro creíamos que estaba cerrado, tomamos un autobús nocturno que nos dejaba en Alexander Platz. Para llegar al hotel, teníamos que coger otro hasta la zona del Zoo, y un tercero hasta Olivaer Platz donde estaba el apartahotel donde nos hospedábamos. Sin embargo nos equivocamos a la hora de tomar el primer autobús, ya que el que cojimos era uno que habían puesto los del metro porque a determinada hora cerraban un tramo de la línea por obras. No hubo mayor problema, ya que el nocturno también pasaba por la parada donde nos dejó este primer bus.

Antes de entrar a la discoteca hay que pasar un patio, donde en la entrada está la taquilla. Creo que fueron 5 euros los que nos costó la entrada, aunque sin consumición. Una vez en su interior primero había unas escaleras que nos llevaban (supongo) a las distintas salas que tiene la discoteca. Digo supongo porque había una cadena para impedir subir o bajar por allí.

Ya pasamos dentro de la sala que estaba abierta y vaya decoración, sencilla pero altamente agradable. A la izquierda había mesas con bancos uno enfrente de otro, y en el centro grandes botellas que tenían una vela encendida que era la única iluminación de esa zona. A la derecha estaba la barra, con unas luces en rojo. Y al fondo una pequeña pista de baile con algunas mesas alrededor.

El sitio tiene cervezas de diversas marcas pero yo seguí con la berliner de la que me aficioné en ese viaje, la cual creo que costaba 2,5 euros la botella de medio litro. También servían copas y creo que cocktails, algo que en otro sitio gótico descubrí que se tomaba por encima de las copas. La música que estuvieron pinchando era un poco de todo de Dark Music.

En este sitio también hacen conciertos, y dos días después había uno de Das Ich por 12 euros (en Madrid semanas atrás costaba 20 euros el ver en directo a este grupo). Aunque mi intención era acudir al mismo, mi acompañante no opinaba igual (le dió miedo las calles donde estaba localizada) y al final estuvimos viendo partidos de la Eurocopa de Portugal que se estaba celebrando, concretamente el tercero de Alemania (el segundo también lo vimos en un bar que encontramos después de subirnos en un autobús y bajarnos donde nos apeteció).

En resumen un sitio cuya decoración me encantó, me recordaba en cuanto a la minima luminosidad a la parte de abajo del mítico heaven de Madrid y al que tendré que volver en otro momento en fin de semana para disfrutar del ambiente gótico en todo su esplendor.

Si es que a fin de cuents a todos nos gusta viajar. Los góticos, esa tribu urbana que siempre está de luto, encuentran en Berlín un paraíso del ocio con una infinidad de locales dedicados a tan peculiar estilo.

Navegando por internet, he encontrado la web DarkDance.net (un nombre muy apropiado), una especia de guía alemana con más de 50 bares y discotecas de diferentes localidades alemanas, Berlín principalemente.

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