lunes, 6 de abril de 2009


Bueno señores los tenia abandonados pero aqui les dejo esto pa que recuperen los discos dañados jajaja, ya muchos los conocen otros no los que no aqui les dejo un gran clasico del death, y bueno sin mas que decirle les dejo la amplia informacion que se puede encontrar en internet al respecto de estos señores.



Reseña Facil de MetalBlade


El grupo BOLT THROWER fue formado en 1986 por Barry Thomson (guitarra) y Gavin Ward (bajo). Pronto se les unió Alan West (voz), y Andy Whale (batería) completó esta primera formación. Inspirado por bandas como SACRILEGE, DISCHARGE, SLAYER y CANDLEMASS, el cuarteto grabó dos demos, 'In Battle...' y 'Concession of Pain'. El segundo fue enviado al gran John Peel (QEPD), quien le ofreció a la banda grabar una sesión para la radio de la BBC. Entonces Gavin Ward decidió cambiar de instrumento para dedicarse a la guitarra, y la banda incorporó a Jo Bench al bajo, completando la formación de quinteto. A comienzos de 1988 BOLT THROWER grababan su primera Peel Session, siendo contactados por el sello Vinyl Solution después de la transmisión al aire de la misma, lo que resultó en el primer contrato discográfico del grupo. Lamentablemente Alan West decidió que no quería seguir siendo parte de la banda, siendo reemplazado por Karl Willetts. En esta formación fue grabado el álbum 'In Battle There Is No Law' en Loco Studios, Gales. El disco fue lanzado en el verano de 1988.

Tocando constantemente en el Reino Unido, la banda fue contactada por el sello Earache Records y Games Workshop, compañía dedicada a los juegos de rol. El resultado fue 'Realm of Chaos', segundo álbum en estudio de la banda, lanzado en 1989 por Earache Records con el arte diseñado por Games Workshop. La banda también fue honrada con la oportunidad de grabar otras dos Peel Sessions (que más tarde fueron publicadas en un álbum). BOLT THROWER comenzaban a crearse la reputación de ser uno de los gurpos con el directo más potente cuando realizaron su primera gira europea en 1990. A comienzos de 1991 la banda grababa el álbum 'Warmaster' en los Slaughterhouse Studios (Driffield, RU) con Colin Richardson como productor. Inmediatamente después, BOLT THROWER realizaban otra exitosa gira por Europa y Estados Unidos.

El siguiente disco, 'The IVth Crusade', fue grabado en el estudio Sawmills (Cornwall, RU) en 1992, probando que la banda continuaba creando un estilo de música absolutamente propio y fácilmente identificable como BOLT THROWER. El álbum fue ampliamente promocionado con giras por Europa y Australia.

La grabación de '...For Victory' en 1994 (nuevamente en Sawmills) fue seguida por la segunda gira americana de BOLT THROWER, durante la cual el batería Andy Whale y el vocalista Karl Willetts lamentablemente decidieron dejar la banda. Sin embargo, el disco fur lanzado ese mismo año, y los músicos que habían renunciado fueron reemplazados por Martin Kearns a la batería y Martin van Drunen a la voz. Con su nueva formación el grupo conitnuó con la promoción del álbum, realizando dos giras por Europa.

Los siguientes dos años se convirtieron en una dura prueba para BOLT THROWER, ya que van Drunen tuvo que ceder su puesto por enfermedad. Además, la banda terminó su relación con Earache Records, firmando ahora por Metal Blade, y finalmente también Martin Kearns dejó libre su lugar. Kearns fue reemplazado por Alex Thomas para la grabación de 'Mercenary' (1998), primer disco de la banda para Metal Blade, en el cual la voz finalmente fue grabada por el retornado Karl Willetts. Sin embargo, Willetts se vio imposibilitado de realizar giras, siendo reemplazado por Dave Ingram, quien recientemente había dejado a BENEDICTION. ‘Mercenary’ tuvo una excelente recepción en todo el mundo, en particular Alemania, donde por primera vez BOLT THROWER entró al ranking de los más vendidos. Siguió otra gira europea, en la que se agotaron las entradas de todos los conciertos, pero nuevamente un integrante salió de la banda – esta vez el batería Alex Thomas. En su lugar volvió Martin Kearns, justo a tiempo para el festival ‘With Full Force’, donde la banda se presentaba por segunda vez.

En Enero de 2001 el grupo realizó algunas presentaciones en Holanda y Alemania, reafirmando su status como uno de los mejores grupos en directo. Inspirados por las reacciones recibidas durante estos conciertos, la banda volvió directamente a estudio a grabar su séptimo álbum, 'Honour, Valour, Pride', el que nuevamente fue muy bien recibido por la prensa y los fans, seguido por una gira europea junto a BENEDICTION, la antigua banda de Dave.

El siguiente gran concierto de la banda debía ser el festival de aniversario de la revista Rock Hard en Alemania, pero, lamentablemente para la banda y sus fans, la presentación tuvo que ser cancelada debido al nacimiento del bebé de Dave. Pocos meses después, cuando la banda comenzaba a componer material para su octavo disco, Ingram decidió que no le era posible continuar en el grupo, y los demás integrantes se vieron frente al dilema de encontrar un reemplazante adecuado. La primera llamada que realizaron fue al ex-integrante Karl Willetts, quien, para alegría de los involucrados, inmediatamente aceptó reincorporarse como miembro estable. Karl comenzó a calentar motores grabando su voz en una versión en demo de ‘HVP’, demostrando que toda su fuerza vocal permanecía intacta.

Con su formación completa, la banda dedicó los siguientes meses a la composición de nuevo material, hasta estar en un 100% satisfechos con los temas terminados. Durante el verano de 2005 el material fue grabado, y el resultado será revelado muy pronto, cuando la banda lance su octavo álbum en estudio, ‘Those Once Loyal’, a fines de este año. Una gira europea ya está programada para 2006, mientras que siguientes giras están siendo planificadas. El futuro promete…

Por 20 gloriosos años de BOLT THROWER...

Reseña Completa de Wikipedia

Bolt Thrower
es una banda de death metal de Coventry, Inglaterra. Se formaron en 1986 y lanzaron su primer álbum con el sello Vinyl Solution en 1988. Entonces cambiaron a un nuevo sello discográfico, Earache Records, pronto se convertirían en una de las bandas con mejores ventas en ese sello. Su sello actual es Metal Blade Records. La banda ha tenido una sucesión de miembros y ha hecho gira por Europa, Estados Unidos y Australia. La banda toma su nombre de un arma del popular juego de mesa de estrategia Warhammer Fantasy Battle. Las letras y portadas de su segundo y tercer álbum fueron también basadas en Warhammer al igual que el futurístico Warhammer 40.000, con mucho de su arte que realmente fue proveído por el publicador del juego, Games Workshop. El tema general de sus letras es la guerra y sus consecuencias.

Historia temprana: 1986-1988

Bolt Thrower se formó en septiembre de 1986 como una banda de hardcore y thrash metal, influenciada en gran parte por bandas de thrash como Slayer y bandas de hardcore punk como Crass y Discharge. La banda fue fundada por el bajista Gavin Ward y el guitarrista Barry Thompson en el baño de un bar en Coventry durante un concierto de hardcore punk. Poco después de eso Andrew Whale y Alan West se unen a la banda en batería y voz respectivamente. En abril de 1987 el demo In Battle There is No Law fue grabado con esta alineación. Su segunda grabación fue el demo Concession of Pain, la cual hicieron en septiembre 1987. Gavin paso a tocar la guitarra y reclutaron a Alex Tweedy para tocar el bajo. Sin embargo, Alex no se presentó para la grabación, entonces Gavin toco ambos, guitarra y bajo, para el demo. Dos semanas después de la grabación, la novia de Gavin, Jo Bench reemplazó a Tweedy. Con esta alineación grabaron su primera Peel Session el 3 de enero de 1988, con John Peel, el disc jockey alternativo de BBC Radio One. El recibió la segunda demo y se puso entusiasta sobre la banda. Ellos grabaron 4 tracks, resultando en un acuerdo con Vinyl Solution para grabar un álbum. Justo antes de la grabación de su primer álbum completo, ellos reemplazaron a su vocalista con su conductor Karl Willets. Su LP debut In Battle There is No Law tiene una duración de media hora y tiene un sonido primitivo y crudo.

1989-1994

Ellos no estaban satisfechos con el acuerdo con Vinyl Solution por que era un sello de puro hardcore en aquel entonces. La marca hizo poca promoción para Bolt Thrower y su mezcla de death metal y hardcore punk, así que después de un álbum Bolt Thrower decidió irse de Vinyl Solution y firmaron con Earache Records. Earache Records tiene también firmadas varias bandas de death metal incluyendo a Carcass y Napalm Death. La banda trabajo un poco en su estilo y cambiaron a tocar rápidas, más agresivas y poderosas canciones, convirtiéndose más en una banda de deathgrind. La producción de este álbum no fue grandiosa, aunque fue una mejora de previos trabajos. La portada fue hecha por Games Workshop (ellos producen juegos como Warhammer) porque el suplemento del juego que ellos producían tenía un nombre similar al álbum que Bolt Thrower estaba por sacar. Después de que Games Workshop escuchara las grabaciones de las canciones de la segunda Peel session, la cual se grabo el 6 de noviembre de 1988, ellos se ofrecieron a hacer la cara portada del álbum de Bolt Thrower. La banda acepto esta oferta. El álbum fue lanzado en 1989 con el titulo de Realm of Chaos y el subtitulo Slaves to Darkness. Muchas de las letras de las canciones fueron influenciadas por el juego, pero no meramente a causa del acuerdo con Games Workshop. Karl, Andy y Gavin estaban muy dentro de los juegos que Games Workshop producía y ellos escribieron unas cuantas canciones sobre estos juegos. Algunos ejemplos obvios son "Plague Bearer" y "World-Eater". Varias de sus letras sin embargo pueden estar proyectadas en la guerra, el tema general que Bolt Thrower usa. Después de la grabación de Realm of Chaos ellos estuvieron en el Grindcrusher Tour con sus compañeros Napalm Death, Carcass y Morbid Angel. En el EP Cenotaph una canción ("Realm of Chaos") fue grabada durante este tour. Este EP también presenta los dos bonus tracks de War Master y Realm of Chaos más la canción Cenotaph. Continuando, ellos graban su tercer y final Peel session el 22 de julio de 1990. El siguiente paso en la historia de Bolt Thrower fue el álbum War Master. Este álbum es muy ingenioso, ellos sacan las influencias grindcore convirtiéndose más en una banda de death metal. Ellos ponen un poco más de habilidad tocando y haciendo que el sonido suene un poco más sofisticado. Y esta vez la producción fue muy habil. Fue grabado, igual que el álbum anterior en Slaughterhouse Studios, que se quemo dos semanas después de que la grabación estuviera completa. De nuevo Games Workshop se ofreció para hacer el trabajo artístico, sin embargo fue considerado muy caro, Bolt Thrower declino la oferta. El antiguo líder de diseño de Games Workshop se presto a hacer el trabajo resultando en una muy similar portada a la de Realm of Chaos. Para promover su álbum War Master en el tour estadounidense, ellos utilizaron un viejo autobús escolar como camión de gira, cargado con varios juegos de computadora. Las tres Peel sessions fueron lanzadas en un solo CD llamado The Peel Sessions 1988-90 en 1991. Su siguiente paso fue el álbum The IVth Crusade . El titulo tiene un doble significado, fue su cuarto álbum de estudio (sin contar The Peel sessions), pero el titulo del álbum también se refiere a la Cuarta Cruzada y la captura de Constantinopla. La portada es una pintura de Eugène Delacroix, mostrando "La entrada de los cruzados a Constantinopla". Bajaron el tono de sus guitarras aún más y escribieron canciones más lentas que fueron más pesadas y bombásticas. Esto se inclina más hacia un Doom Metal influenciado por bandas como Candlemass, en combinación con su propio sonido masivo de death metal. El álbum fue seguido por el tour World Crusade con la banda polaca de death metal Vader y la banda sueca Grave en Europa. La banda fue de gira a E.U.A. y también en Australia. Durante este tiempo un demo fue lanzado, llamado Spearhead conteniendo un muy pesado y extendido remix del track Spearhead más dos nuevos tracks y Dying Creed del álbum.
Alineación Clásica (de 1988 a 1994)
  • Karl Willets: Voz
  • Gavin Ward: Guitarra
  • Barry Thompson: Guitarra
  • Jo Bench: Bajo
  • Andy Whale: Batería
Su siguiente álbum es llamado ...For Victory y fue lanzado en 1994. Fue el último álbum con Karl Willets y Andrew Whale. Ambos dejaron la banda por cambiar su dirección en la vida. El último tour americano no estuvo muy bien, regresaron a casa prematuramente y por ese tiempo la banda estaba harta de hacer gira. También hicieron un regreso parcial a sus raíces Hardcore/Thrash metal sin olvidar sus influencias Doom, aunque la voz tendía a sonar un poco diferente, menos gutural, pero más estilo hardcore punk; fue más algo como un grito ronco especialmente en "When Glory Beckons" y "Armageddon Bound". Una edición limitada del álbum existe conteniendo un bonus Cd en vivo, llamado War (a veces llamado Live War). Después del lanzamiento del álbum Karl Willets fue reemplazado por Dutchman Martin van Drunen y Martin Kearns tomo la batería.

1995 al presente

En 1995 y 1996 la banda hizo 2 tours por Europa. En 1997 Martin van Drunen decidió dejar la banda ya que nunca se sintió realmente parte de Bolt Thrower, y también por que tenía una enfermedad que hacia que su cabello se cayera debido a que se sentía inseguro en el escenario. Martin Kearns decidió irse también. La posición de la batería es ahora tomada por Alex Thomas. Karl Willets temporalmente se reunió con la banda para hacer el trabajo vocal en el siguiente álbum. La banda cambio de sello discográfico de Earache a Metal Blade Records, por que a partir del tour ...For Victory ellos veían una carencia de éxito con Earache. Además Earache quería tomar control de ellos y Bolt Thrower quería irse cuanto antes. El álbum titulado Mercenary fue lanzado el 8 de septiembre de 1998 en Europa y el 10 de noviembre de 1998 en E.U.A. y presenta 9 tracks. Es más lento que sus predecesores. Sin embargo es definitivamente muy pesado y con sonidos muy a lo Bolt Thrower. Y Karl regresa a interpretar su previo estilo de canto; las influencias de hardcore punk han desaparecido de nuevo. Después de la grabación del álbum, Karl deja la banda de nuevo y la banda recluta a Dave Ingram permanentemente después de que deja Benediction. En noviembre de 1998, Earache Records lanza Who Dares Wins, un álbum presentando varias viejas grabaciones, incluyendo las grabaciones de los EPs Spearhead y Cenotaph. La banda no estuvo de acuerdo con el lanzamiento de este álbum. Originalmente el titulo era No Guts-No Glory pero el titulo fue cambiado por que una canción en Mercenary tenía el mismo titulo y Metal Blade objeto. Siguiendo el lanzamiento del álbum un tour europeo fue hecho, llamado Into the Killing Zone con Dave Ingram en vocales. Después de un corto tour europeo en el 2001 (solo 5 fechas) empezaron a trabajar en un nuevo álbum. Honour-Valour-Pride fue lanzado a últimos del 2001 en Metal Blade y muestra una progresión de la dirección tomada en Mercenary. Contiene 9 tracks; El digipack contiene un bonus track. Martin Kearn esta de vuelta con la banda después de arreglar las cosas en su vida. Alex Thomas salio de la banda por desinterés en la dirección musical de Bolt Thrower. En 2004 la banda empieza a trabajar en material para su nuevo álbum. Intentaron grabar en mayo del 2004. Mientras tanto un tour europeo y estadounidense fue preparado. Desafortunadamente justo antes de que la grabación pudiera empezar, Dave Ingram decide irse debido a problemas personales y de salud. Esto arruino la nueva grabación y los tours, y la prioridad fue encontrar un nuevo vocalista. El 18 de noviembre de 2004, la banda anuncia el regreso de Karl Willets a la banda. La grabación del álbum, titulado Those Once Loyal, empezó en mayo del 2005; fue lanzado el 11 de noviembre en Alemania, 14 de noviembre en el resto de Europa y 15 de noviembre en los Estados Unidos.

Miembros


Alineación Actual

  • Barry (baz) Thompson - Guitarra líder (1986- )
  • Gavin Ward - Guitarra Rítmica (bajo en los demos) (1986- )
  • Jo Bench - Bajo (1987- )
  • Martin (Kiddie) Kearns - batería (1994-1997, 2000- )
  • Karl Willets - Voz (1987-1994, 2004- )

Miembros Pasados

  • Alex Tweedy - Bajo (1987)
  • Alan West - Voz (1986-1988)
  • Dave Ingram - Voz (1997, 1998-2004)
  • Martin van Drunen - Voz (1995-1997)
  • Alex Thomas - Batería (1997-1999)
  • Andrew (Andy) Whale - Batería (1986-1994)

Discografía


Demos

  • In Battle There is No Law (1987)
  • Concession of Pain (1987)

Álbums de Estudios

  • In Battle There is No Law (1988)
  • Realm of Chaos (1989)
  • War Master (1991)
  • The IVth Crusade (1992)
  • ... For Victory (1994)
  • Mercenary (1998)
  • Honour-Valour-Pride (2001)
  • Those Once Loyal (2005)

En Vivo y Compilaciones

  • The Peel Sessions 1988-90 (1991)
  • War (1994)
  • Who Dares Wins (1998)
Entrevista extraida de CuantoyPorqueTanto

La coherencia es una cualidad que se va ganando con actos a lo largo del tiempo. En todos los ámbitos de la vida resulta complicado tomar un camino y seguirlo hasta el final. Existen muchas trabas, tentaciones y circunstancias que impiden continuar la senda marcada. Además, puedes permanecer en la ruta pero creando un círculo vicioso o, como diría el gran compositor Antonio Vega, “Se dejaba llevar”. En la música podríamos poner miles de ejemplos de gente que comenzó su viaje en una dirección y terminó en la opuesta. También de aquellos que, cuan anillos de “La Divina Comedia” de Dante, siguen con su destino a ninguna parte. El primer caso no tiene por qué ser malo. Gente como Katatonia, Carcass, Tiamat, Samael, con mayor o menor acierto, se alejaron de sus inicios ofreciéndonos soluciones arriesgadas más sobresalientes. Tan difícil como eso es marcarte una línea y mantenerte fiel siendo capaz de crear obras notables. Esto les ocurre a nuestros protagonistas.
Son casi 20 años desde que en la localidad inglesa de Coventry se formó Bolt Thrower. Cerca de Birmingham, donde se gestaba el metal extremo europeo, las raíces punk thrash evolucionaron rápidamente hasta pasar a formar parte de la incipiente escena death. Desde entonces, 7 álbumes, algún que otro Ep, y un interesante recopilatorio para aquellos que no dispusieran de los mentados Ep´s, hasta llegar al año 2005 y su nuevo trabajo “Those once loyal”.
Nada nuevo bajo el sol. Lo que para muchos grupos esta frase tendría connotaciones negativas, en el quinteto de Coventry se revela como algo positivo. Desde los tiempos de “Warmaster” (1991), sus detractores podrán decir que Bolt Thrower sacan el mismo tipo de disco con ligeras variaciones. Eso es cierto pero no lo es menos el que para sus seguidores no sólo no se repiten sino que cada álbum que editan ofrece matices que hacen amena su escucha. A lo largo de las 9 composiciones de “Those once loyal” encontramos un montón de death tradicional en el clásico medio tiempo de la formación. El riff poderoso y la sección rítmica son vitales en la estructura musical de los de Coventry. Si bien el comienzo del párrafo decía eso de nada nuevo bajo el sol, no es del todo correcto porque hay una noticia magnífica, la vuelta de Karl Willets al seno del grupo. Oficialmente ausente desde 1994, con el paréntesis de la grabación de “Mercenary”, una década después regresa el vocalista para sustituir a Dave Ingram. No es que este último lo hiciera mal, es más, me pareció el sustituto ideal pero Willets es la voz de Bolt Thrower y es una alegría su retorno.
Una de las características principales de los británicos es que tanto en disco como en temas sueltos, cada uno tiene su favorito. En “Those once loyal” nada destaca muy por encima de lo demás. El comienzo “At first light” recuerda a los días de “The 4th Crusade” y “...For victory”. “The killchain” o “Granite wall” vagan más por la línea marcada en “Mercenary” por la tonalidad de las guitarras. El tema título, en mi opinión, será un clásico del grupo en años venideros, y “Salvo” otra canción muy de directo. Como veis, hay para todos los gustos, dentro del “universo Bolt Thrower” lógicamente. Una de sus guitarristas y fundadores, Gavin Ward nos concedió una entrevista en la que afirma con rotundidad que, tras casi 2 décadas, visitarán España.
CYPT: Lo primero que se me ocurre es preguntaros qué actividades relacionadas con la banda habéis hecho en estos cuatro años desde “Honour, valour, pride”.
GAVIN: Lógicamente tras sacar aquel disco hicimos alguna gira pero desde entonces hemos escrito canciones y rehecho otras. Cuando Dave abandona el grupo y Karl vuelve nos propusimos adaptar “Honour, valour, pride” a los registros de Karl y lo dejamos todo grabado en un estudio para, posteriormente, colgarlo en nuestra web. Cualquiera puede chequear la demo del tema “K-Machine” cantado por Karl. También sucedió que los temas de “Those once loyal” inicialmente fueron pensados para Dave por lo que también los rehicimos, practicamos mucho en el local hasta que quedamos satisfechos, estuvimos mes y medio en labores de preproducción y, finalmente, entramos al estudio.
¿Cómo afrontáis la salida de Dave Ingram y fue Karl Willets la primera opción?
Sí, por supuesto. Con Karl estuvimos muy bien cuando grabó con nosotros “Mercenary” 4 años después de abandonar el grupo. Por diversas razones en aquel instante no pudo volver a la banda por lo que cogimos a Dave. Ahora las circunstancias eran distintas y es un placer tenerle de nuevo con nosotros.
Si algo se puede decir del disco nuevo es que, como siempre, permanecéis leales a vuestra carrera.
Sin duda. Desde el apartado de producción sí que se pueden notar cosas nuevas o elementos diferentes, pero compositiva e instrumentalmente hablando, la línea es similar, no ha cambiado gran cosa respecto a anteriores trabajos.
El hecho de que Karl esté de vuelta, ¿ha cambiado algo vuestra manera de componer, quizá hacia algo más “old school”?
No, para nada. Antes de que Karl se marchara teníamos un método que permaneció una vez abandonó el grupo. Primero, los riffs de guitarra; posteriormente, la sección rítmica para lograr una estructura; y, al final, los solos y las voces.
Entonces, ¿cuál es la clave para seguir sonando frescos?
¡Uff! No lo sé. Tal vez que siempre estamos renovando nuestro equipo para conseguir mejores instrumentos. A pesar de tocar el mismo tipo de música que hace 15 años, esto le da un añadido actual a nuestras canciones. También, como te he comentado, la producción y, supongo, el hecho de ser mejores músicos que nos permite introducir matices.
Por lo tanto, retomando lo que has dicho antes, el riff es la base para componer una buena canción.
Para mí, no hay duda. Si no hay un gran riff, nunca puede haber una buena canción, por lo menos en el caso de Bolt Thrower. Por mucho que las voces sean notables o la batería espectacular creo que estamos en un género orientado al sonido de guitarra.
Me gustaría que me comentaras un par de tópicos alrededor de Bolt Thrower.
- Tocáis canciones a medio tiempo: Nosotros tocamos lo que nos sale en el local de ensayo o en casa practicando, no importa el qué. Evidentemente tenemos un estilo que no vamos a variar ahora. En el pasado sí que teníamos temas muy rápidos con blast beats y tal, pero nuestra evolución nos llevó a decelerar las canciones en aras a sonar más pesados e intensos.
- Escribir canciones pegadizas y recordables dentro del death: Para mí, en muchas ocasiones, lo mejor es lo más simple. Si eres capaz de crear algo que la gente pueda recordar con facilidad, pienso que has acertado. Incluso, cuando componemos riffs muy técnicos, siempre intentamos simplificarlos. La combinación pegadizo – simple puede dar muy buenos resultados. Además, cuentas con la ventaja de que se reproducen fácilmente en directo. He visto a muchas bandas supertécnicas que en estudio suenan increíbles, ser incapaces de reproducir sus canciones encima de un escenario.
Cualquier aficionado al death metal es capaz de reconocer una canción de Bolt Thrower por lo característico del grupo. Sin embargo, no hay demasiados conjuntos que suenen a Bolt Thrower. ¿Ves algún motivo para ello?
No lo sé, tal vez prefieran practicar otras vertientes del death en las que puedan conseguir más dinero y éxito. No obstante, pienso que es bueno tanto para nosotros como aquellas potenciales bandas que nos copiaron. Es estúpido ser un clon de otro grupo, tienes que buscar tu propio camino. En el death metal tienes distintas escuelas, la de Florida, la inglesa, la europea. Es positivo esa variedad.
El título del disco, “Those once loyal”, ¿se refiere sólo a la guerra?
Bueno, como en alguna ocasión precedente hemos querido utilizar símiles de guerra y que cada uno los lleve a su vida diaria. En el título del disco también. Si te das cuenta nosotros intentamos buscar el lado positivo de las guerras. No se me malinterprete, las guerras son malas pero en muchas contiendas pasadas se exaltaron valores como la lealtad, el honor, la valentía o el orgullo. No queremos describir los miles de muertos, para eso ya están los noticiarios.
¿Te has encontrado en la música con bandas que “una vez fueron leales” a su sonido y ahora reniegan del mismo?
Bueno, no lo sé, o mejor, no quiero saberlo. Lo que sí es cierto es que hay un montón de mierda en el rock actual. Si coges a los grupos de hoy en día, te darás cuenta de que, en el 90% de los casos, sus discografías han ido en declive, lo mejor, sus primeros trabajos.
¿Cuándo empieza en Bolt Thrower el escribir letras relacionadas con la guerra?
Todos nosotros hemos leído bastantes libros y algunos coleccionamos comics de guerra pero, en realidad, quien comenzó todo este concepto fue nuestro primer cantante, Alan West, que escribió este tipo de textos para “In battle there´s no law”. Nos pareció interesante y a partir de entonces profundizamos para conseguir material relacionado.
Creo que ha sido Karl el encargado de escribir las letras del disco...
...Sí, yo hice algunas frases o estrofas, Baz también, pero fue Karl el que mayoritariamente se ocupó de los textos, adaptando incluso algunos que había dejado por ahí escritos Dave Ingram.
Esta vez habéis cambiado el clásico dibujo de portada por una especia de grabado en piedra.
Sí, es una placa conmemorativa de la Primera Guerra Mundial que se encuentra en una plaza londinense. Cuando la vimos pensamos que era una imagen épica pero, casualmente, la descubrimos en una web húngara o algo así. Entonces vimos que la placa estaba en Londres y un día que estuvimos allí fuimos a visitarla.
Habéis repetido equipo en la producción con Andy Faulkner en los estudios Sable Rose.
Sí pero esta vez hemos trabajado de modo distinto intentando no repetir los errores que cometimos en “Honour, valour, pride” donde, probablemente, alargamos algunos temas innecesariamente y el bajo estaba tapado por las guitarras. En “Those once loyal” creo que es un sonido más integral en todos los sentidos.
¿Consideras que nadie mejor que la propia banda sabe cómo debéis sonar?
Sí, incluso admitiendo que vamos a cometer bastantes fallos y que hay gran margen de mejora en este aspecto pero creo que ni el mejor productor del mundo lo haría perfecto si la banda en cuestión no estuviera allí supervisando todo.
En 2006 se cumple el vigésimo aniversario del grupo. La gira será de presentación de “Those once loyal” o más bien de la celebración de dos décadas de Bolt Thrower.
No, está más relacionada con el nuevo disco. No habrá ninguna conmemoración especial. Lo que sí te puede decir es que estamos ansiosos porque llegue el año 2006. Tenemos muchas ganas de regresar a los escenarios europeos con un tour que será muy potente (N. de R: Días después se confirmó que Malevolent Creation, Nightrage y Necrophagist serían sus acompañantes) y largo. Recorreremos países en los que jamás habíamos tocado con anterioridad...
... Entre ellos España.
Sí pero paradójicamente tampoco en Grecia, Portugal o Finlandia. Iremos a España es abril.
¿Seguro? En vuestra web no hay fechas españolas en la gira.
Pues yo te aseguro que en abril estaremos en España. En la página web hay unas 28 fechas confirmadas pero añádele otras 20 o 25 (N de R: De éstas, ya hay 9 cubiertas en Escandinavia), con ello se completará un extenso tour por el continente.
¿Hay alguna canción que siempre debéis tocar si queréis salir vivos del local?
(risas) Bueno, espero que la gente no sea tan ansiosa. Siempre intentamos mostrar a la gente lo último de Bolt Thrower pero sin exagerar, es decir, sería ilógico tocar “Those once loyal” entero pero sí que nos gusta que los fans lo aprecien. Como banda que tiene bastantes discos buscamos un equilibrio.
En una entrevista que leí con la bajista del grupo, Jo Bench, comentaba que no les gustaba mucho tocar en festivales. ¿Estás de acuerdo con ella?
Por lo general, sí. Prefiero tocar en un club, con unas condiciones mejores de sonido, ante tus propios fans, durante más tiempo. El festival es algo más divertido para los grupos pero desde un plano extramusical.
Parece que hoy en día si nos sacas un DVD no eres nadie. Hay algunos buenos pero tenemos muchos ejemplos lamentables. ¿Tenéis previsto sacar un DVD en un futuro próximo?
No porque, como bien dices, hay mucha mierda por ahí. Solemos grabar en vídeo la mayoría de nuestros conciertos. En la próxima gira pasará igual e, incluso, si algún día lo hacemos muy bien podemos sacar un disco en directo pero si sacáramos un DVD tendría que ser 100% profesional y con material atractivo para los fans no por el mero hecho de decir “Ya tengo mi DVD, ¡qué bien!”.
¿Qué hacéis con esas grabaciones, las utilizáis luego para ver qué podéis mejorar?
A veces nos sentamos todos juntos cuando finaliza una gira y nos reímos con anécdotas que vemos en esas cintas. También comprobamos algún fallo puntual o escénico que pueda ocurrir pero, obviamente, no visionamos todo el material, sólo una mínima parte.
Leyendo alguna que otra revista inglesa para que ha aumentado la presencia de giras por las islas. ¿Crees que la escena es mejor que hace 7 u 8 años?
Yo pienso que es tan mala como entonces, por lo menos para nosotros que habremos tocado un par de veces en la última década en nuestro país. Inglaterra siempre ha sido muy modista, tal vez ahora haya una pequeña escena underground pero tampoco muy fuerte. Veremos si en abril tocamos por aquí.
¿Ves alguna similitud en “Those once loyal” con algún otro disco previo de Bolt Thrower? No hablo en el plano musical sino más en el contexto, estado de ánimo a la hora de componer, posición como banda, etc.
Siempre digo que el mejor disco posible de Bolt Thrower saldría de una combinación de todos los anteriores, una especie de pasado, presente y futuro mezclados en su justa medida. Ha habido gente que me ha comentado que “Those once loyal” les recuerda a “For victory” o “The 4th Crusade”. No tengo nada que objetar, me parece bien, son grandes álbumes.
Desde el principio tocabais death metal por lo que es obvio que no habéis hecho ricos con la música. Entonces, ¿cuáles son las motivaciones que os mantienen activos 20 años después?
Las mismas que el primer día cuando nadie tocaba la música que hacíamos. El death metal nos proporciona adrenalina para mantener la motivación intacta. Me gustan muchos tipos de música pero ninguna me acelera, me apasiona tanto como el death.
¿Y sigues escuchando la misma música?
Me tiran mucho más los clásicos que las cosas más modernas. Continuo oyendo con regularidad Black Sabbath, Dio y similares
Siempre aparece como referencia de Bolt Thrower la ciudad de Birmingham pero vosotros sois más de Coventry. ¿Cuál prefieres?
Las ciudades huelen mal. Yo vivo en una pequeña población a la que llamo “el paraíso”. Cada vez que tengo que desplazarme a una ciudad populosa no me gusta nada.
Hace no mucho falleció John Peel, el mítico locutor de radio que tanto contribuyó para dar a conocer bandas como Carcass o vosotros mismos.
Sí, era mi locutor favorito, lógicamente. Tocamos un par de veces en su programa. Una lástima que el hombre muriera porque era todo un personaje.
Con el recuerdo al mítico periodista concluimos la entrevista emplazándonos para abril a ver, si por fin, podemos ver en los escenarios españoles a estos dioses del death metal rítmico, como siempre digo, la respuesta británica (y más oscura) a Obituary.
Reseña de GreyZine

ARTISTA: Bolt Thrower.
ÁLBUM: Those Once Loyal.
DURACIÓN: 39.33
AÑO: 2005.
SELLO: Metal Blade Records.
PAÍS: UK.
ESTILO: Death. Thrash.
SUENA COMO: Dismember. Grave.
WEB: Bolt Thrower Web
MYSPACE: Bolt Thrower MySpace
LASTFM: Bolt Thrower LastFM
SAMPLE:
TRACKLIST:
1.At First Light.
2.Entrenched.
3.The Killchain.
4.Granite Wall.
5.Those Once Loyal.
6.Anti-Tank (Dead Armour).
7.Last Stand Of Humanity.
8.Salvo.
9.When Cannons Fade.
10.A Symbol of Eight.


Regresa una vez mas la legendaria banda inglesa Bolt Thrower, con Those Once Loyal su octavo trabajo hasta la fecha y probablemente el mejor que hayan editado en su larga carrera.
El sonido de Bolt Thrower para aquellos que no les conozcáis es metal de vieja escuela; Una mezcla de Death con Thrash pero con ese sonido de metal ingles inconfundible. Ademas han logrado añadir a sus composiciones mas ambiente, cosa que en anteriores cds no existía, era mas violencia y brutalidad que otra cosa.
Las composiciones de la Bajista Jo-Anne Bench a diferencia de muchos grupos del estilo, se pueden escuchar limpiamente a lo largo de todos los temas de Those Once Loyal; Su complementación con el sonido de la batería es genial. La batería suena en un segundo plano como mas bajita que el resto y el bombo tiene un sonidete a caja de galletas que me encanta.
Las guitarras suenan espectaculares en Those Once Loyal y es que la producción del cd es buenísima. Por lo general los ritmos son en todo momento machacones y como anteriormente dije tienen ese aire de vieja de escuela inglesa inconfundible.
Quizás el hecho del retorno a las voces de Karl Willetts, ha sido beneficioso para Bolt Thrower ya que vuelven a tener esa seña de identidad característica. El tono grave de Willets es de esos que reconoces nada mas escuchas y eso dentro de cualquier genero musical hace diferente a una banda. Porque nada mas escuchas entrar las voces en At The First Light, ya sabes que estas ante lo nuevo de Bolt Thrower.
Las canciones mas destacadas son Those Once Loyal que da nombre al cd y que es un himno épico marca de la casa. El tema Salvo que a pesar de ser un pelin mas lenta que el resto del cd tiene unos riffs geniales. Entrenched que comienza con una sirena de bombardeo y tiene la mejor composición de bajo del álbum. When Cannons Fade que es la clásica canción de la formación de Coventry.
Si te apetece escuchar el mejor cd de Bolt Thrower hasta el momento, solo tienes que buscar este Those Once Loyal. Como curiosidad destacar que ya no usan portadas de Warhammer 40.000, cosa que en su día les hizo famosos. Eso si todas sus letras siguen hablando única y exclusivamente de Guerra.
Cenotaph de el pulpito jajaja

Queridos hermanos, endurecemos el sonido de este sermón para presentaros a uno de los grupos decanos dentro de la escena del death metal. Bolt Thrower (sitio oficial) forma parte de la primera hornada de grupos que practicaron esta disciplina en Inglaterra.
Surgidos en 1986, publicaron su primer disco In Battle There Is No Law dos años después, una obra con fuerte influencia de la escena punk: el sonido es sucio, en parte por la mala producción pero también en parte porque sonaba así, totalmente primitivo, con algunos toques que casi recuerdan al Altars of Madness de los Morbid Angel. El siguiente disco se tituló Real of Chaos (1989), y con sólo ver la portada a los jugones les llamaré potentemente la atención por su parecido a las ilustraciones de Games Workshop: en efecto, el disco tiene muchísima relación con el magnífico juego Warhammer 40.000. Representantes de la empresa, tras escuchar la segunda sesión grabada con John Peel, se animaron a cooperar con ellos con las ilustraciones. Eso, añadido a que algunos miembros de la banda ya eran jugadores del grupo, hace que el disco sea casi un homenaje al universo del juego.
Para el siguiente disco, War Master (lanzado en 1991 y que resultará clave a la hora de catalogar su estilo personal), la alianza con Games Workshop no se mantuvo a causa de que estos pedían excesivo dinero por el uso de sus ilustraciones. Sin embargo un ex-diseñador de la empresa se ofreció a ayudarles con los dibujos: el resultado lo podemos ver en forma de magníficas ilustraciones que recuerdan no sólo a Warhammer, sino también a un cruce entre Terminator y Conan. Es en lo relativo al sonido donde se nota el avance más importante: abandonan definitivamente el hardcore y se introducen en un death lento, obsesivo, con claros toques de Black Sabbath. No se puede hablar de una canción concreta dentro de este disco, que es otro de esos redondos, pero quizá la que más sorprenda sea ‘Cenotaph’, a todos los efectos buque insignia de la banda y canción imprescindible en su repertorio (el tema incluso ha servido de inspiración a algún fan de la banda a la hora de escribir un relato). Por poner algún otro tema, decir por ejemplo ‘Profane Creation’, el propio ‘War Master’, ‘The Shreds of Sanity’ o ‘Destructive Infinity’ (tema magnífico que increíblemente sólo aparece como extra en el CD).
Con su cuarto trabajo, The 4th Crusade (1992), ratifican la dirección de su estilo, conformando un disco soberbio. El tema que da título al disco es antológico, y se encuentra arropado de toda una cohorte de maravillas intensas, inmisericordes. En el disco prácticamente desaparecen los riff rápidos, dejándonos con un muro de sonido lento, pesado, en el que la voz de Willetts actúa como un buldózer, machacando lo poco que quedara en pie. Como curiosidad comentar que la letra del último tema, ‘Through the Ages (Outro)’, consiste en una lista de conflictos. Si para entonces alguien lo dudaba, ya no puede: los Bolt Thrower son unos adictos a los temas bélicos.
A esta etapa pertenece el directo Live War, de sonido humilde pero intensísimo. Una grabación imprescindible para los seguidores del grupo.
La temática bélica se mantiene en el siguiente álbum, …For Victory (1994), aclamado mundialmente como su mejor trabajo hasta la fecha (fecha de entonces, se entiende). Temas como ‘Lets We Forget’ o el propio ‘…For Victory’ dejan claro el impresionante nivel de calidad compositiva de la banda, comportándose como un tanque de primera generación.
Tras la gira que siguió al disco el cantante Karl Willetts y el batería Andy Whale se apartan de la banda, siendo sustituidos por el ex-cantante de Pestilence (banda que posee un disco imprescindible en lo que se refiere al death europeo: Testimony of the Ancients), Martin van Drunen, y por el batería Martin Kearns. Van Drunen no duró mucho en la banda: la alopecia areata le venció tanto como el, según dijo, no sentirse integrado. Martin Kearns le siguió un tiempo después, pero con su pelo.
E el puesto de vocalista se coloca Dave Ingram, ex-Bendiction, si bien las voces del fallido Mercenary (1998) siguen siendo de Willetts, que regresa justo para eso. El disco no acaba de convencer a buena parte de los fans, resultando flojo y monótono. Ingram sí aporta su voz en el siguiente Honour-Valour-Pride (2001), más resultón pero no a la altura de los clásicos de Willetts. Éste regresará de nuevo a la banda (y ya como miembro oficial) para incluir su voz en el impresionante Those Once Loyal (2005), un disco con el que la banda consigue crear una nueva obra maestra. Temas como ‘At First Light‘ no merecen comentario alguno: sólo se pueden disfrutar con humildad ante lo impresionante de su sonido.
Por desgracia, tal y como dicen en su página web (en la entrada de 12 de Junio de 2008), parece que no van a sacar por ahora más discos dado que este último Those Once Loyal lo consideran perfecto, definitivo, y el nuevo material que han compuesto (según ellos) es de calidad inferior a la del citado.
Aquí os dejo con una muestra de los Bolt Thrower en plena gloria, con uno de los mayores exponentes de su arte.
Cuando acabéis de menear la cabeza no olvidéis alabar a nuestro dios de metal: él es quien inspira estas maravillas.

La cuarta cruzada

Tras dos discos que acusaban una amalgama entre el grindcore y death metal, la banda sorprende con un death metal más consistente y sólido en “Warmaster”. “The Ivth Crusade” mejora lo que tan bien Bolt Thrower hace, y pocos logran: un death metal sumamente contundente sin ir a velocidades altas añadiendole un componente bélico a su música y letras. Es un CD ideal para escuchar en una trinchera o en el fragor de una batalla.

Así tiran bombas como “Embers” (Y sus demoledores riffs en el inicio y fin del tema), tiempos medios alternados con velocidad en “Icon” y “Ritual”. La banda actúa como un bloque, no hay un músico que se destaque por sobre otro y el trabajo en equipo es el que hace de este disco una joya. En “Through The Ages (Outro)” cierran el disco mencionando literalmente todos los conflictos bélicos del Siglo XX. Colin Richardson en la consola simplemente hace que todo suene aún más pesado, impactante, gracias a su brillante trabajo.

Martin

Entrevista 14-06-06 por MondoSonoro

Bienvenido a casa El regreso de Karl Willets como vocalista en “Those Once Loyal” (Metal Blade/Mastertrax) les ha valido a Bolt Thrower para rubricar su álbum más sólido en más de una década. No se trata por tanto de ninguna pequeñez teniendo en cuenta los escasos pasos dados en falso por la formación de Birminghan, cuyos álbumes son siempre celebrados por los seguidores del detah metal más genuino.

”Karl siempre ha estado en la trastienda de nuestras mentes, tanto que si algo ocurría con cualquier cantante sabíamos que volveríamos a preguntarle a él. Lo hicimos y se unió por entero”. Su incuestionable integridad como banda se ha visto enaltecida fruto de una provechosa colaboración, que ha arrojado como resultado un disco donde prima la inmediatez. “Creo que la mayoría del material se ha basado en simplificar sobre nuestros principios fundamentales, lo cual hemos aplicado en las composiciones más a medio tiempo. Anteriormente habíamos hecho algunas canciones más lentas y en esta ocasión queríamos resumir, por lo cual hemos hecho algunos cortes más cortos y por supuesto más rápidos. Es un estilo al que le van mejor las canciones más cortas”.
"Las producciones son una especie de lotería. Utilizamos productores de primera línea para los últimos tres discos"
Un esfuerzo de síntesis con un completo trabajo de guitarras en el que su brutal pero exquisito gusto por la contundencia, las harmonías y sus inconfundibles solos, se han medido por vez primera en igualdad de condiciones con el resto de instrumentos. “Sabemos que en discos anteriores hemos utilizados guitarras muy gruesas en lo que se refiere a los ritmos, consiguiendo así un muro pero desplazando a un segundo plano la batería y el bajo. En esta ocasión las hemos puesto a un nivel razonable para que bajo y batería puedan escucharse. En lo que se refiere a las guitarras, Barry ha buscado más variedad y quizá sea por eso por lo que es disco es más diverso entre canciones. Pero como en cada álbum intentas componer buenos temas, en ocasiones lo consigues y en otras no”. Quizá por eso hayan decidido responsabilizarse de la producción de su octavo larga duración, teniendo muy presente la sapiencia y la capacidad de crítica que la veteranía otorgan. “Las producciones son una especie de lotería. Utilizamos productores de primera línea para los últimos tres discos. El hecho de producirlo nosotros como en esta ocasión con la ayuda de alguien ha hecho que sea mucho más fácil ya que sabemos y conocemos lo que escribimos. Con eso y con todo nunca sabes si va a sonar bien o mal, si a la gente le gustará o no, mientras que lo estás haciendo es algo que desconoces. Si mientras estás trabajando en ello piensas que no es tan bueno, puede que ésa sea una buena manera de afrontarlo. Las producciones cambian de disco a disco y de una manera u otra vas a cometer errores”.

Concierto

Parece que fue ayer pero han pasado tres lustros de la historia que voy a relatar. Cuando en la MTV llegaban los últimos efluvios de aquello que una vez programaron en su parrilla y que respondía al nombre de heavy metal, en el mítico “Headbanger´s ball” con Vanessa Warwick existía una sección llamada “Triple thrash video” en el que descubrí un montón de grupos. Uno de ellos presentaba su segunda (o tercera, según se mire) obra, “Warmaster”, con el clip de la gloriosa canción “Cenotaph”. Fue un flechazo similar al que tuve con Obituary y su “I don´t care”. Death metal rítmico, en cierto modo pegadizo y con riffs machacones. Para mí, ideal. Desde aquel día, Bolt Thrower se convirtieron en uno de mis grupos favoritos del género y, por qué no, del metal en general. Sin embargo, no se habían acercado nunca a nuestro país y, desgraciadamente, en mis viajes a festivales europeos no me había topado con su propuesta. Por fin, como nos anunciaron en la entrevista que publicamos hace unos meses, les teníamos ante nosotros.
Los británicos estaban inmersos en la segunda parte de su gira “Those once loyal 2006” y este segmento había suscitado cierta polémica con las bandas teloneras. Inicialmente, se comunicó que serían Gorefest los acompañantes, algo bestial y casi habría que considerarles como “invitados especiales” por la trascendencia de su carrera, sobre todo la primera parte. Pocas semanas antes del comienzo, los holandeses renunciaron (o fueron expulsados) debido a que exigían unas condiciones exageradas para los ingleses. Así, rápidamente, se buscaron sustitutos con renombre decidiéndose que en algunas fechas fueran God Dethroned y en otras, entre ellas las españolas, Kataklysm con lo que la decepción se aminoraba ya que los canadienses son un magnífico combo. No obstante, parecía que había un duende suelto intentando fastidiarlo todo porque a menos de una semana del concierto, Kataklysm cruzaron el charco alegando motivos personales con lo que God Dethroned se presentaron en España tan sólo unos meses después de sus shows abriendo para The Haunted y God Forbid.
Mucho se especuló con el lugar elegido. Al final, la minúscula Ritmo y Compás que se convirtió en un hervidero de metaleros desde primeras horas de la tarde. El buen tiempo que hacía en la calle se tornaría, dentro de un local, en un infierno dado el llenazo que había. Antes de pasar a hablar de las actuaciones en sí mismo, comentar un par de cosas que me chocaron. En primer lugar, lo baratos que eran los precios tanto de entradas como en el tenderete. Tal y como están los tiempos, 12 euros por el concierto es casi un regalo. Asimismo, camisetas, camisas y gorros muy accesibles. Lástima que se hubieran terminado los cd´s. Otro apunte destacado es que, nada más llegar, nos topamos de bruces con la enorme humanidad de Shane Embury de Napalm Death y Tony Laureano de tantos. Junto a ellos, en segundo plano, reconocido por muy pocos y vestido con un sombrero de cowboy, el gran Jeff Walker de Carcass con el que tuvimos ocasión de departir un rato acerca de su trabajo en solitario, la salud de su ex compañero Ken Owen y algunas otras historias de guerra siempre con su buen humor británico. Los tres estaban en Madrid porque al día siguiente tocaban con Brujería en el Viñarock.
Como era previsible, un lleno hasta la bandera dejó pequeña Ritmo y Compás. Probablemente en un sitio más grande no habría habido una afluencia muy superior pero, reitero, el calor era tremendo y eso que con God Dethroned el público estuvo muy tranquilito. Sólo había tenido una ocasión de ver a la banda liderada por Henry Sattler. Fue en el transcurso del Eurorock 2001, en Bélgica, y, sinceramente, me decepcionaron un poco y eso que presentaban “Ravenous”, un magnífico álbum. Eso sí, me parece que en estudio no tienen disco malo siendo un grupo bastante infravalorado, en mi opinión. Al coincidir con otro concierto en Madrid, no les vi con The Haunted por lo que me apetecía comprobar si había mejora o no sobre las tablas.
“Nihilism”, el corte que abre su último aunque ya lejano “The lair of white worms”, fue la encargada de comenzar la descarga. El sonido era aceptable, sin más, pudiéndose distinguir, cuanto menos, todos los instrumentos aunque sin una gran brillantez. Me sorprendió un poco el hecho de que casi parecía que estábamos en la gira del “Into the lungs of hell” por el número de cortes que tocaron de éste. Tres sobre ocho si no recuerdo mal: la potente “The warcult”, “Soul sweepers” y la pegadiza “Tombstone”, imprescindible en todas sus actuaciones. A pesar del baile de miembros en los últimos años, la formación es realmente sólida e imagino que Tony Laureano (que grabó con ellos “Ravenous”) no vería mancillados sus ritmos en la brutal “Villa Vampiria” por parte de Arien Van Weesenbeek. También fue un poco paradójico que los dos mejores temas de “The lair of white worms”, el que le da título y “Arch Enemy Spain”, fue ignorados cuando me comentaron que en su show de diciembre sí cayeron. Por el contrario, interpretaron “Sigma enigma” que, sin ser malo, sí que es una canción un tanto simple.
Cerraron sus 40 escasos minutos con, quizá, su tema más conocido, “Serpent king” de su obra cumbre “Bloody blasphemy”. La destrozaron un poco e iban cada uno a su bola pero, en resumen, creo que God Dethroned cumplieron su papel, fueron unos teloneros más que dignos y me quitaron el mal sabor de boca con ellos que me duraba más de cinco años. Tal vez mi elección de repertorio hubiera sido muy distinta pero ya se sabe que tan poco tiempo no da para mucho más.
Estaba convencido de que Bolt Thrower no me iban a defraudar, las ganas que tenía de verlos eran enormes, pero no esperaba la avalancha que nos vino encima nada más abrirse la puerta del camerino del local. Con las primeras notas de “At first light”, de su último “Those once loyal” se desató el Apocalipsis, un pogo salvaje pero “educado”, gente tirándose del escenario, 50º centígrados,... Sin embargo, siendo completamente objetivos, tanto “At first light” como “Entrenched” no sonaron demasiado nítidas. Las guitarras quedaban un poco ahogadas a la hora de ejecutar las melodías y la mezcla de todos los instrumentos era confusa. Cada miembro del grupo sabía el papel que le tocaba jugar en el minúsculo escenario: La base rítmica en el fondo con una Jo Bench que no se movió de la zona junto a la escalera; Gavin y Barry quietos pero sin parar de hacer headbanging a la vez que nos martilleaban con sus poderosos riffs; y Karl Willets de maestro de ceremonias clavando todas y cada una de las canciones que ejecutaron.
A partir de la tercera canción la cosa mejoró sonando como debe de ser, sin alardes pero compacto y poderoso. Encima coincidió con momentos bestiales ya que sin margen para el descanso nos aplastaron consecutivamente con “World eater” (la única de “Realm of chaos”) y “Cenotaph” con la gente completamente loca, saltando, moviendo la cabeza, chocando unos con otros, etc. Como siempre, cada cual puede tener un repertorio favorito con ocho discos a sus espaldas pero los británicos tenían su propia elección que me pareció acertada. Lógicamente, interpretaron más de “Those once loyal” que de cualquier otro, equilibrando el resto de trabajos llegando a incluir cosas como “Incide the wire” de “Honour, valour, pride”, el único disco que no grabó Willets aunque hace un año colgaron en su página web una demo con Karl a las voces.
No puedo destacar un instante concreto, una imagen, una canción, todos resultaron tremendos y dudo que alguna de las 300 personas allí congregadas no se dejara llevar por la apisonadora que eran encima de un escenario. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con una banda de death metal, tal vez sólo sea comparable a cuando vi por primera vez a Obituary hace una década y salí impresionado con el actualmente no tan afortunado John Tardy. Una tras otra caían esos potentes medios tiempos, rítmicos y con ese “groove” tan peculiar. “When glory beckons”, “The killchain”, “Powder burns” o la mencionada “Inside the wire”. Eso sí, como todos tenemos nuestros corazoncito, me emocioné al escuchar los acordes de “No guts, no glory” y, por supuesto, la seminal “The IV Crusade”, cumbre compositiva de su larga trayectoria. Otra de las destacaría dentro del sobresaliente cum laude que se merecieron fue “Warmaster”, vivida hasta la extenuación por una audiencia casi exhausta. Con “When cannons fade” se despidieron y es que si todo escribano tiene su borrón y el de Bolt Thrower fue la duración. Tampoco pido 90 minutos de tanta intensidad pero ¡1 hora! es poquísimo dejándose en el tintero un montón de canciones.
Con todo, el increíble sabor de boca nos lo dejaron con otra fundamental, “... For victory” donde todos dimos las pocas fuerzas que no restaban en esa noche. Parecía que habíamos corrido una maratón, sudando y físicamente destrozados, pero esa velada con Bolt Thrower fue memorable, reitero, de lo más grande que he presenciado en este género por parte de unos tipos llanos, afables y con el entusiasmo intacto. Una delicia.
Bolt Thrower es sinónimo de Death Metal. La dilatada carrera de los ingleses nos dejó como último trabajo una gran obra maestra llamada "Those Once Loyal" y de la cual hablamos con su vocalista Karl Willetts. Aprovechamos la calma que precede a la batalla para conocer los entresijos de estos guerreros

Lord Zaebos: ¡¡Saludos Karl! Gracias por tomarte tu tiempo en contestar la entrevista. ¿Qué tal va todo?
Bolt Thrower: Ahora mismo está todo muy tranquilo en Bolt Thrower, tras haber empezado todo de forma frenética. Tras la cancelación de la gira americana, nos pusimos a trabajar de lleno en nuestro nuevo Dvd. El material a incluir serán conciertos filmados en nuestros dos últimos tours, entre ellos el Rock Hard en Gelsenkirchen. La verdad es que está tomando bastante tiempo la recopilación de todo el material.
Lord Zaebos: Antes que nada, ¿por qué esperar cuatro años para un nuevo cd de Bolt Thrower?
Bolt Thrower: Pues no es nada intencionado, las cosas no siempre pasan según lo planeado. En el último cd, Dave abandonó la banda y yo volví a entrar. Las canciones estaban compuestas, se volvieron a revisar hasta tenerlas a punto. Sabíamos que teníamos que editar algo que fuera realmente especial, así que nos tomamos nuestro tiempo en grabar y en la producción. ¡¡Esperemos que no tengáis que esperar hasta el 2009 para poder oír nuestro nuevo cd!
Lord Zaebos: Háblanos un poco de las sesiones de grabación de Those Once Loyal…
Bolt Thrower: Grabamos el cd en los Sable Rose studios en Coventry, en el cual también ensayamos. Así que grabamos con nuestro propio equipo e instrumentos y nos llevó aproximadamente 3 meses. Andy Faulkener es el dueño de los estudios, además de ser nuestro técnico de sonido de guitarras en las giras, así que lo conocemos bien y la atmósfera de trabajo es muy relajada. ¡¡3 meses mezclando y grabando el cd hicieron del estudio nuestra propia casa!! Nos aseguramos de tener todo bien grabado, con buenos balances y bien tocado, lo cual nos tomó nuestro tiempo.
Lord Zaebos: Contigo en el grupo de nuevo, ¿cuales son las principales diferencias en cuanto a letras entre el nuevo disco y Honour Valour Pride? ¿Qué tal fue tu vuelta al grupo?
Bolt Thrower: Las canciones de Honour Valour Pride tienen la misma estructura y tiempos que en otras canciones de Bolt Thrower. Las letras hablan de lo mismo que en Those Once Loyal. La única diferencia son los registros vocales. En cuanto a mi vuelta, la verdad es que fue muy reconfortable. Todo funciona a la perfección y me ha gustado mucho volver a trabajar en ensayos y estudio con el resto del grupo. Andaba un poco inquieto por cómo volvería a sonar mi voz en un disco de Bolt Thrower, pero tras una serie de pruebas, supe que tampoco estaba tan mal como pensaba hehehe.
Lord Zaebos: La guerra es un tema omnipresente en Bolt Thrower. ¿Cómo veis en vuestro país el terrorismo islámico?
Bolt Thrower: Hemos crecido con el terrorismo, con los problemas en Irlanda del Norte durante los años 70 y 80. Así que para nosotros no es nada nuevo el tema. Actualmente creo que el terrorismo asociado al fundamentalismo islámico es la mayor amenaza que existe para todo el mundo.
Lord Zaebos: Baz es el que compone. Pero ¿qué nos puedes decir sobre a la hora de escribir letras?
Bolt Thrower: En cuanto Baz tiene los riffs y las estructuras de los nuevos temas, Gav y yo nos ponemos a trabajar en las letras. Intercambiamos ideas y creo que ha funcionado la fórmula, ya que Gav tenía muchas ideas sobre letras en todo este tiempo de sequía.
Lord Zaebos: En la edición limitada de Those Once Loyal, hay una canción titulada Symbol Of Eight. En cada disco, los números se incrementan (en el pasado fue 7th Offensive). ¿Es por algo en especial?
Bolt Thrower: Sí, nos gusta jugar con los números; es una especie de enlace entrada cada álbum. Empezamos en el ´92 con nuestro cuarto cd The IV Crusade. Básicamente estábamos sorprendidos de haber editado nuestro cuarto disco. Así que mantuvimos la dinámica de los números.
Lord Zaebos: Personalmente, me gusta mucho más Those Once Loyal que el anterior. Pero, también he de decir que no hay mucha variación en la música, con la única variación de las voces. Pero como fan del grupo es lo que espero. Ahora bien, ¿qué podéis decir a esos que dicen “un disco más de Bolt Thrower”?
Bolt Thrower: Bueno, esa es nuestra forma de ver la música. Sabemos qué es lo que funciona, y no nos queremos desviar mucho de ese camino. Otras bandas lo intentaron en el pasado y fracasaron, así que el nuevo cd es totalmente Bolt Thrower. Hemos cogido todos los elementos que funcionaron anteriormente en nuestra discografía y los hemos metido todos en Those Once Loyal. La calidad en la producción es la mayor que hemos tenido hasta la fecha, aunque aún nos queda margen para movernos en esta área. El sonido del bajo se ha elevado lo cual le da más fuerza en las canciones a la vez que el sonido de guitarras se ha hecho menos dominante. Estamos muy contentos con el resultado final del cd.
Lord Zaebos: Una cosa interesante es que The Killchain empieza como otras canciones ya grabadas con anterioridad en vuestra discografía, ¿por qué?
Bolt Thrower: Ese es el enlace que antes te he comentado que conecta con discos anteriores, y con futuros, está claro. El riff de The World Eater también aparece en las siguientes canciones: World Eater, Cenotaph, Embers Powder burns y The Killchain. Se enlazan entre ellas cuando tocamos en los conciertos.
Lord Zaebos: ¿Por qué Those Once Loyal? ¿Por qué este título para el disco?
Bolt Thrower: Es una especie de tributo a todos aquellos que han contribuido y apoyado al grupo durante los 20 años de existencia. Y, esto incluye tanto a miembros del grupo, tanto del presente como del pasado, la gente que rodea a Bolt Thrower y fans.

Lord Zaebos:
Una cosa importante y diferente en el nuevo cd, es la portada, ya que es un poco diferente a otros discos. ¿Por qué usar una imagen más de estudio y dinámica como portada?
Bolt Thrower: La imagen de la portada encaja con muchas letras que hemos compuesto para el cd. Me gusta cómo ha quedado por que funciona. De todas formas, no soy muy fan de las portada tipo fantasía. No queríamos ser predecesibles con la portada, por que una vez más, daríamos pie a afirmaciones como las que hemos mencionado antes. Se le ocurrió un día a Jo, cuando miraba una imagen del Guards Memorial en Londres. Creo que captó a la perfección la idea de originalidad, ya que nunca había visto esta imagen en una portada de cd, con anterioridad. No en un grupo de la escena Metal, por lo menos.
Lord Zaebos: ¿Que opináis sobre esos grupos que toman vuestra influencia para componer música. ¿Conocéis a alguno de los grupos que os insinúo?
Bolt Thrower: Bueno, yo personalmente conozco dos ejemplos de lo que me comentas. Uno es Mutilation, que su sonido está muy influenciado por Bolt Thrower. Y, otro que destacaría es Heaven Shall Burn. Me gusta ver que hemos podido influenciar a gente en su forma de ver la música. No lo tomamos como una agresión ni nada parecido.
Lord Zaebos: 20 años en la escena. ¿Os dedicáis a tocar o tenéis que trabajar también?
Bolt Thrower: Baz tiene su trabajo en su vida personal, aunque el resto del grupo no trabajamos. Nos dedicamos por completo a Bolt Thrower.
Lord Zaebos: ¿Vendréis de nuevo por España?
Bolt Thrower: Tocamos 3 fechas en España, y he de decir que la experiencia fue muy positiva para nosotros. La gente se entregó en nuestros conciertos al 100%. Esperemos poder organizar algo para este año y poder anunciar que España está entre las fechas elegidas.
Lord Zaebos: ¡Gracias por la entrevista Karl! ¡Últimas líneas para los que os leen!
Bolt Thrower: “Hasta luego amigos”. Nos vemos…Grind On!!
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